Leyendo

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lunes, 10 de abril de 2017

Es algo bueno haber nacido para morir, aunque sólo fuera para eso

Aunque no es fácil para mí reseñar un libro así, lo haré lo mejor que pueda. Esta es una de las obras capitales de Jack Kerouac, se sitúa en el "renacimiento de San Francisco", un período cumbre en La generación Beat, marcado por jazz, poesía y orgías. El mensaje del libro puede resumirse en la cita que da nombre a esta entrada "es algo bueno haber nacido para morir, aunque sólo fuera para eso". ¿Cómo de feliz crees que eres? Otro planteamiento de los que Kerouac nos presenta brillantemente: la felicidad espontánea, la dicha experimentada por cosas tan simples como dormir bajo un manto de estrellas sin otro ruido que el rumor de un arroyo cercano. Bien es verdad que toda la narración está impregnada de la filosofía budista y rebosa de espiritualidad; razón por la cual me hizo desconectar totalmente de la rutina e Internet para sentir otro tipo de conexiones. No es un relato con principio y fin. Lo importante es dejarse llevar por las palabras del genio y no tener prisa por terminar. Recomiendo Los Vagabundos del Dharma sólo a quienes les apetezca enfrentarse a este tipo de literatura, porque si lo vas a leer sin ganas, ni te molestes. Sí que es cierto que si fuera vosotros probaría a Kerouac, a ser posible, antes de los veinte años.
 
 
Kerouac, Jack: Los Vagabundos del Dharma. Anagrama, 1996.
Reseña escrita por: Marisa Salvador Martínez, 4ºB.

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