Este libro cuenta en forma de crónica periodística la muerte de Santiago Nasar, nuestro protagonista, asesinado por los hermanos Vicario (como sabemos desde el comienzo del relato, de ahí el título del libro "de una muerte anunciada") con el propósito de vengar la deshonra de su hermana, Ángela Vicario.
Podemos ver cómo la muerte puede llegar en el momento más inesperado, independientemente de nuestros actos, cuando Santiago es asesinado injustamente y de la manera más cruel y violenta. Una muerte planeada y anunciada, de la que todo el mundo tenía constancia, excepto el propio protagonista y su madre. Con esto, el autor quiere decirnos que vivamos cada día como si fuera el último, porque la muerte puede estar a la vuelta de la esquina.
Me sentí identificada con Santiago Nasar, ya que a menudo estoy absorta de lo que me rodea, aunque el resto no lo esté. Además, en ocasiones tengo sueños que luego acaban sucediendo, al igual que le ocurre finalmente al protagonista.
En particular, creo que Ángela Vicario tenía otras opciones y no debería haber culpado a Nasar, sin tener "vela en este entierro". Ángela tendría que haberse responsabilizado de sus actos y haber afrontado el problema. No me gustó la forma en la que asesinan a Nasar, fue demasiado agresiva y fuerte; si lo que pretendían era acabar con su vida, podrían haberle disparado simplemente.
Recomendaría este libro a todos aquellos que estén habituados a leer, que disfruten con la literatura clásica y con el realismo mágico de Gabriel García Márquez.
Podemos ver cómo la muerte puede llegar en el momento más inesperado, independientemente de nuestros actos, cuando Santiago es asesinado injustamente y de la manera más cruel y violenta. Una muerte planeada y anunciada, de la que todo el mundo tenía constancia, excepto el propio protagonista y su madre. Con esto, el autor quiere decirnos que vivamos cada día como si fuera el último, porque la muerte puede estar a la vuelta de la esquina.
Me sentí identificada con Santiago Nasar, ya que a menudo estoy absorta de lo que me rodea, aunque el resto no lo esté. Además, en ocasiones tengo sueños que luego acaban sucediendo, al igual que le ocurre finalmente al protagonista.
En particular, creo que Ángela Vicario tenía otras opciones y no debería haber culpado a Nasar, sin tener "vela en este entierro". Ángela tendría que haberse responsabilizado de sus actos y haber afrontado el problema. No me gustó la forma en la que asesinan a Nasar, fue demasiado agresiva y fuerte; si lo que pretendían era acabar con su vida, podrían haberle disparado simplemente.
Recomendaría este libro a todos aquellos que estén habituados a leer, que disfruten con la literatura clásica y con el realismo mágico de Gabriel García Márquez.
García Márquez, Gabriel: Crónica de una muerte anunciada. Latimer, 1981.
Reseña realizada por Marta Jiménez Solana, 4ºB.
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