Se confirmaron mis sospechas; siempre había creído que el amor te volvía más vulnerable; por eso enamorarse era un terrible error.

Este libro, totalmente diferente a los tres anteriores, narra la vida de la hija del príncipe Maxon con la elegida en su Selección (Eadlyn). Eadlyn, tras darse cuenta de que la situación tras la eliminación de castas se le va de las manos a su padre, cede a hacer una Selección para calmar al pueblo, a pesar de que no cree en el amor. La Selección consiste en que 35 chicos al azar vayan a pasar a palacio un tiempo en el que la próxima reina (o rey) elija a la persona con la que se va a casar. Eadlyn se va decantando más por unos y va eliminando a otros para decidirse y tenerlo claro.
En esta historia se refleja que a veces lo más importante no es tener poder, ya que cuando el amor entra en tu vida nada será tan esencial como eso. Al amor no se le pone barreras ni nos podemos negar a él.
De este libro me quedaría con el personaje de Maxon, ya que es sensato y sabe distinguir cuándo hace falta tener poder y cuando hace falta quitarse esa máscara para amar a su familia.
Se lo recomendaría a aquellas personas a las que les encanten el cotilleo y las historias románticas. Y a los que se han leído los tres anteriores, deciros que con este libro la autora ha intentado sacar jugo de donde no lo había, porque aprovecha el éxito de la trilogía para sacar una historia mediocre (a mi parecer).
 

 

Cass, Kiera: La Heredera (La Selección). Roca, 2015.
Reseña escrita por María Jiménez Castro, 1º C.