Leyendo

Leyendo

lunes, 13 de mayo de 2019

El destino de esta escuadra no es la muerte, como creíamos al principio, sino una muerte infame

Escuadra hacia la muerte es una obra teatral de Alfonso Sastre, uno de los dramaturgos españoles más destacados. La historia se desarrolla en una hipotética Tercera Guerra Mundial donde cinco hombres sin espíritu militar, Alfonso, Luis, Javier, Pedro y Andrés, se encuentran dirigidos por el estricto Cabo Gobán. No hay un claro protagonista pues la historia se centra en el pelotón en conjunto. Estos hombres están en ese pelotón por distintos castigos, desde dejar a sus compañeros sin pan como matar a varios hombres, por lo que ninguno es un héroe que transmita solo valores positivos. Todos ellos pasan los días esperando al enemigo, que simboliza la muerte, que no llega, por lo que reflexionan sobre su pasado. Mediante diálogos muy expresivos logra hacernos una idea clara de los pensamientos de cada personaje. Sin embargo, un inesperado acontecimiento cambiará la rutina de los chicos que empezarán a planear qué quieren hacer con sus vidas y sus caminos terminarán separándose. Sastre plantea una dura crítica a los valores humanos.
No me identifiqué con ningún personaje en concreto, pues aunque todos presentan ideas distintas, no termino de compartirlas con niguno de ellos. Sin embargo, sí hubo uno que me causó especial recelo: el cabo Gobán. Trata con desprecio a sus compañeros y no tolera cualquier sugerencia de mejora.
Se trata de una obra que recomiendo encarecidamente a todo aquél al que le guste el teatro que haga pensar, pues te hace reflexionar sobre algunas cosas absurdas de nuestro día a día así como de que no hay nadie bueno o malo. ¿Tiene sentido seguir viviendo? ¿Cuál es nuestro objetivo? Son algunas de las preguntas que asaltan la mente del lector atento.

Sastre, Alfonso: Escuadra hacia la muerte. Castalia, 1953.
Francisco Miguel Callejas Rojas. Alumno de segundo de bachillerato B.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe aquí tu comentario, que será moderado por el autor del blog. Gracias.